El compromiso voluntario pasó a 2040, en lugar de 2050, gracias al trabajo realizado en sustentabilidad en los últimos años.

Ser sustentables está en el ADN de Trivento. Las acciones de triple impacto realizadas en los últimos años en la bodega permitieron abrazar el desafío de adelantar su contrato voluntario de alcanzar cero emisiones netas para 2040.

“Trabajamos intensamente para disminuir nuestras emisiones relacionadas al uso directo de energía como también en el packaging.”

Mercedes Álvarez, Head of Sustainability 

Desde 2009 la bodega mide sus emisiones GEI y en 2018 realizó la medición de la huella de carbono organizacional para trazar una línea base sobre la cual trabajar. A partir de esto se identificaron áreas clave de mejora y se implementaron programas de eficiencia energética que abarcan desde un software para mapear los consumos, el apagado de luminarias y equipamientos cuando no están en uso, hasta inversiones en nuevos equipos.

En el camino de la reducción de emisiones, en 2019, la compañía instaló una planta fotovoltaica de 918 paneles solares, una de las mayores inversiones en energía renovable de la industria vitivinícola en el país. Ésta permite reemplazar el 10% de la demanda eléctrica del predio ubicado en Maipú por energía renovable y, hasta el momento, ha generado 1.503 MWh.  

Durante 2023, la compañía redujo su huella de carbono del año 2022 mediante la adquisición de Certificados de Energía Renovable (REC), con los cuales compensó el 100% de las emisiones de la energía eléctrica empleada en sus operaciones.

Trivento transita y trabaja con mucha convicción el camino de la sustentabilidad que ayuda a cuidar tanto a quienes forman parte de la bodega como al entorno que la rodea.